El Congreso de Puebla aprobó una polémica Ley de Voluntad Anticipada que permite a las personas decidir sobre tratamientos médicos al final de la vida. Mientras tanto, el presidente de la Junta de Gobierno del Congreso declaró que las reformas sobre aborto tendrán que esperar a la próxima legislatura.
El Congreso del Estado de Puebla aprobó la Ley de Voluntad Anticipada, que establece las normas y requisitos para que las personas con capacidad de ejercicio puedan expresar su decisión sobre ser sometidas o no a tratamientos médicos que pretendan prolongar su vida cuando se encuentren en estado terminal, respetando su autonomía y dignidad.Por otra parte, el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso, Edgar Garmendia de los Santos, señaló que las reformas a la Ley de Salud relacionadas con la interrupción legal del embarazo tendrán que ser abordadas por la próxima legislatura.
Garmendia indicó que el periodo ordinario de sesiones del tercer año de actividades de los diputados en funciones se cerró el lunes, por lo que solo podrán darle trámite a los temas que ya se encuentran en análisis, como oficios de ayuntamientos e iniciativas aprobadas por comisiones.
Garmendia declaró que serán los próximos legisladores quienes decidan si retoman las iniciativas presentadas o si consideran necesario contar con nuevas. “Es un tema que tendrá que tocar la próxima legislatura, el día de ayer cerramos y ya estamos en el proceso de la Comisión Permanente para sacar los temas que tenemos, probablemente tengamos una extraordinaria”, afirmó.
Cabe mencionar que la aprobación de la despenalización del aborto en Puebla no tendrá un costo político para los diputados que la respaldaron, según lo señalado por Garmendia.
El presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso reviró las acusaciones de los legisladores del Partido Acción Nacional (PAN), quienes aseguraron que la validación de la interrupción legal del embarazo era una “lucha histórica” en el estado.