Ietza Abril Soler Cano, la joven estudiante de la Prepa 3 de la UNAM, que se suicidó tras ser acosada por tres de sus profesores, “era una chica brillante que adoraba a sus hermanos”, de acuerdo con la descripción de su madre, Liliana Cano.
“Mi hija era una chica hermosa, brillante, con muy buenos sentimientos, con valores”, dice con la voz quebrada Liliana Cano. “Ietza era lo más maravilloso que yo tenía, lo más perfecto que yo he hecho en toda mi vida”, exclama, con los ojos anegados de lágrimas.
Y es que Ietza Abril, sostiene su madre, “además de ser una chica inteligente, era muy educada, sensible, amorosa y tímida”. Debido a eso, sus padres decidieron apoyarla para que la joven tuviera un negocio de dulces y, mediante eso, pudiera generar más seguridad.
Para labrarse un camino en el futuro, Ietza ingresó a varios cursos. Sin embargo, la falta de capacitación de sus profesores, quienes, lejos de apoyarla, la acosaron y generaron en ella estrés e inseguridad, provocaron que la adolescente se suicidara el pasado 25 de abril.
El padre de Abril, José Soler, señala que su hija era “muy hogareña” y que estaba reflexionando si estudiaba Psicología o Animación Digital. Era muy cariñosa con sus dos hermanos y con su gatita “Kamala Harris”. Infelizmente, todos eso se truncó debido al acoso de tres profesores.
La primera: María Gabriela Reveles, profesora de Inglés, quien se quejaba del timbre de voz de Abril. Le decía, de forma denigrante, que hablaba muy bajito, que no se le entendía nada. La profesora, aseguran, se centraba en aspectos personales y no en los académicos.
El segundo: Daniel Calvillo González, quien le impartía la clase de Geografía. El docente, aseguran, la descalificaba diciéndole, a gritos, que tenía letra horrible. También ejercía violencia de género diciéndole que a una mujer no se le permitía tener el cuaderno tan maltratado.
La tercera de sus acosadoras, aseguran, era Luz Marina Castro Calva, profesora de Matemáticas, quien nunca dejó de acosarla y gritarle frente a la clase. Más allá de los señalamientos, los tres maestros tienen una evaluación muy deficiente por parte de los alumnos de la Prepa 3.
Los compañeros de Ietza Abril han hecho un llamado a presentar denuncias formales contra estos profesores. El objetivo es ejercer presión sobre la UNAM y que los directivos investiguen las quejas por maltrato contra los alumnos del plantel “Justo Sierra”.
Alumnos y madres y padres de familia de jóvenes de la Escuela Nacional Preparatoria de la UNAM, afirman que estos profesores ya tenían varias denuncias en su contra y, por ello, ya se había pedido la destitución de los docentes debido a los malos tratos hacía diferentes estudiantes.
“Le fallaron a mi hija en vida. Ojalá que ahora que necesitamos una fuerte sanción para estos profesores, que se jactan de estar protegidos, la UNAM sepa imponerla, si todavía conserva un poco de respetabilidad, porque cada vez está perdiendo más credibilidad”, remata la madre.
“Lamentablemente, a la directora Laura Elena Cruz Lara, a la titular de las ENPs (Escuela Nacional Preparatoria), María Dolores Valle Martínez y al rector Enrique Graue, lo que ocurra dentro de las instalaciones universitarias, le vale madre”, dice uno de los profesores. “Ellos ya se quieren ir”.
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