Según reportes del INEGI, los precios en artículos de higiene personal y limpieza se ha disparado casi en un 10% en la primera mitad de julio. El uso recurrente de grandes papel higiénico, pañales, pañuelos desechables y otros artículos de aseo personal e higiene de un solo uso, se han convertido en artículos indispensables para la vida cotidiana tanto en tiendas, escuelas, casas, hospitales y negocios, debido a la pandemia que aún aqueja al mundo.
No debe sorprender que empresarios como Claudio X. González Laporte, presidente de la empresa Kimberly-Clark de México, ha aprovechado la gran presencia que tiene en el mercado de los productos higiénicos en México y la enorme la necesidad del uso de estos artículos durante la pandemia para incrementar los precios en sus productos entre un 5% a 7%, excusando el alza comercial por el aumento en el costo de las materias primas. Por lo que los lemas de su compañía como “Nuestro compromiso con México, población vulnerable y personal de respuesta” en la vida real, no tienen el mismo impacto que en su campaña publicitaria.
Kimberly-Clark de México, ha sido cuestionada por obtener millonarios beneficios en gobiernos anteriores al ser exhibida hace apenas un año, pues se dio a conocer que en 2009, CONACYT entregó un subsidio por 36 millones de pesos a Kimberly Clark de México, a través del Programa INNOVATEC para una “investigación” relativa a la absorción de un tipo de pañal.