El afamado baterista Gregg Bissonette estuvo en la Ciudad de México el pasado domingo 25 de febrero, vino a dar una clínica y clase magistral en la Sala Hermilo Novelo, del Centro Cultural Ollín Yoliztli, en un evento organizado por Percussive Arts Society (PAS) Leadership Academy, capítulo México, y su presidente interino Marciano Moreno, a quien le agradezco me haya permitido asistir al evento, y charlar con el baterista.
Gregg Bissonette es considerado uno de los mejores bateristas de la actualidad, principalmente en el género del Rock, sin embargo, toca también Jazz de manera asombrosa. Forma parte de la banda de Ringo Starr (baterista de The Beatles), junto al guitarrista Steve Lukather, y saxofonista Warren Ham, ambos de la banda Toto; Colin Hay, vocalista del grupo Men at work; Edgar Winter, tecladista, saxofonista y percusionista, y el bajista Hamish Stuart, del grupo Average White band y con el grupo de Paul McCartney.
Como parte de su historial, él ha colaborado con David Lee Roth (ex vocalista de la banda Van Halen); con los guitarristas virtuosos Joe Satriani, y Steve Vai. Igualmente, tiene varios créditos en soundtracks de películas (Sex and the city) y de televisión (Friends), por mencionar algunos.
El baterista estadunidense de 64 años, ofreció una espléndida cátedra, pues durante su clase, iba contando sus anécdotas con músicos y lo combinaba tocando la batería, respondiendo dudas o preguntas de la audiencia. Bissonette fue famoso en los 90 también porque publicó videos sobre cómo tocar su instrumento; pero escucharlo en vivo, fue una experiencia inigualable.
El carismático baterista siempre respondía a las preguntas del público con amabilidad y en un tono académico, pero también de amistad. Eso provocaba que todos se animaran a preguntarle o pedirle algo. Gregg hablaba en inglés, pero gracias a una traductora, los asistentes que lo requerían echaban mano de audífonos con traducción simultánea al español.
Alrededor de las 6 de la tarde Gregg finalizó su participación con un medley de más de 10 minutos, que pasó por el Rock, Jazz, Pop y hasta un poco de electrónica y demostró que con cada canción o melodía, imprimía un toque especial y característico. Pasó del Rock Pop de Message in a bottle de The Police, con Day Tripper de The Bealtes, It´s the most wonderful time of the year de Andy Williams y sorprendentemente con Shake it off de Taylor Swift.
Al término de su clase, Bissonette dio autógrafos a sus fans que llevaban discos, al mismo tiempo que se tomó fotos con sus seguidores. Llegó el momento en que el baterista se tenía que ir, pero gracias a Marciano Moreno -quien le habló de mí-, pude charlar a solas con él, por unos pocos minutos, en inglés.
Lo primero que hice fue mostrarle la foto que me tomé con él en la puerta del Auditorio Nacional, (donde tocó con Ringo Starr) la última vez que vino. Y se sorprendió que le solicitara que me la autografiara e inmediatamente después, nos tomamos una selfie.
Le pregunté sobre su sentir acerca de México. Dice que le encanta venir de vacaciones, sobre todo a Cabo San Lucas y a Cancún, donde tocó en el Festival de Jazz con el guitarrista Larry Carlton.
También me contó que ya había dado clínicas y conciertos con el ex Beatle, en nuestro país.
Este 5 y 6 de junio van a regresar al Auditorio Nacional junto con los músicos antes mencionados. Yo considero que el Gobierno de la Ciudad de México los debería contratar para que toquen gratis en el zócalo de la CDMX, sería un éxito total, con un ex Beatle (ya estuvo Paul) y músicos de mucho prestigio.
Gregg considera que los mexicanos somos muy cálidos, maravillosos y que tenemos grandes bateristas con buena vibra. También confesó que adora nuestra comida, nuestra cultura y la pasión del público que asiste a sus conciertos.
Declaró que el último concierto que ofreció con Ringo en México fue increíble y mientras hacía referencia a Tom Brady (estrella del futbol americano) cuando le preguntaron cuál fue su mejor Súper Bowl y él respondió “el que viene”, Gregg aseguró que su próximo concierto con Ringo en nuestro país, también será su mejor experiencia.
Le pregunté qué significado tiene para él la música y el Jazz. El baterista me respondió: “La música para mí, es un regalo de Dios”. Dice que escucha música todos los días y lo pone de buen humor, muy feliz. Y acerca del Jazz, dice que lo ama, porque sus padres tocan ese género y creció escuchándolo, así que cuando piensa en el Jazz, piensa en sus padres. Por cierto, Bissonette fue invitado para tocar en el memorial dedicado al fabuloso baterista Buddy Rich en 1989, donde tocó con una Big Band, y lo hizo espléndidamente.
Acerca de sus clínicas y clases magistrales, le pregunté qué es lo que siente cuando tiene a muchos jóvenes entre su público asistente, dice que lo hace pensando en sus profesores, cuando les cuestionaba sobre música, por lo que es una forma de regresar a ese conocimiento, ese que le dieron sus maestros y que ahora él les brinda a los jóvenes.
Acerca del mejor concierto que ha dado, me respondió que probablemente fue el que le ofreció a Ringo Starr y a Paul McCartney, porque fue muy especial para él.
Finalmente, le pedí que, en un video breve, les mandara saludos a sus fans mexicanos y accedió, no sin antes invitarlos a asistir a los conciertos que ofrecerá con Ringo Starr. Ya está circulando por Internet en mi YouTube.
Le conté que la canción con quien identifico a la muchacha de quien estoy acaramelado, se llama África, de la banda Toto, justamente porque ella se llama Libia Scarlet, y tiene ese nombre, porque sus padres se lo pusieron en honor a ese país que se encuentra en ese continente. Ella es de origen afro, porque nació en Acapulco. Por eso, esa canción es tan especial para nosotros.
Aproveche para pedirle que esa historia se la comentara a su amigo Steve Lukather, guitarrista de Toto, con quien comparte escenario en sus giras con Ringo.
Y, por cierto: Toto tocará gratis para el público en la Feria de San Marcos, en Aguascalientes el próximo 3 de mayo y los acompañará Greg Phillinganes, cuya voz angelical y teclado han acompañado también a Eric Clapton, por muchos años.
Para mí fue un placer haber convivido con Gregg Bissonette. Les recomiendo escuchen su tema instrumental Sasquatch (junto a Michael Landau) de su disco Submarine (2000), y escuchen tambien el tema Time Check en el Memorial a Buddy Rich
Cuando salí de la Ollín Yoliztli, miré a Gregg y a Marciano, solos, en la avenida principal, con sus maletas. Me despedí de ellos, deseándoles buen viaje. Después de unos minutos se fueron en un coche particular que llegó a recogerlos. Y ahí estuvo parado, en esta CDMX, uno de los mejores bateristas del mundo, en la actualidad quien toca, casualmente, junto a otro baterista, el que quizá fue el más famoso en los años 60.
