Hace unas semanas se presentó un fenómeno natural que paralizó casi todo Estados Unidos de América denominado “Ciclón Bomba” en el cual se presentaron ventiscas extremas, llenando diversos sitios de nieve. Muchas personas quedaron varadas y algunas fallecieron al colapsar los servicios de emergencia en Estados Unidos, ya que las temperaturas descendieron por debajo de los 50 grados centígrados (-50ºC). Si bien este fenómeno se desarrolla usualmente en Canadá y Estados Unidos, en esta ocasión también afectó al norte del país, principalmente los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Querétaro, Hidalgo y Veracruz, en donde las temperaturas bajaron hasta alcanzar los -15 grados centígrados en algunas zonas.
El ciclón bomba o bombogénesis lo define la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés) como una tormenta que se intensifica rápidamente, bajando la presión drásticamente en unas pocas horas. Este fenómeno sucede cuando una masa de aire frío (proveniente del polo) se encuentra con una masa de aire cálido y húmedo (proveniente del trópico). Sin embargo, para que se dé este fenómeno se tienen que dar condiciones muy específicas.
En primer lugar, es importante entender que, por regla general, en las latitudes entre el ecuador y los trópicos, la energía que llega del sol es mayor; mientras que fuera de los trópicos la energía que llega del sol es menor. Este desbalance de energía es el causante de la circulación atmosférica en la tierra, la cual tiende a ir de cálido a frío y viceversa, por lo que el viento frío proveniente de los polos viajaría hacia el ecuador, y el viento caliente del Ecuador, se dirigiría hacia los polos. Sin embargo, la circulación atmosférica es un mecanismo más complejo, debido a que la rotación del planeta juega un papel importante en esta, dividiéndola en tres sectores de circulación con características diferentes a lo largo de cada hemisferio.
La primera celda, es conocida como “de Hadley”, y dentro de ella se presentan los climas tropicales, de manera particular, estados como Chiapas, Quintana Roo, o Yucatán, que se encuentran bajo la influencia de esta celda, presentan climas tropicales. Por otra parte, la segunda celda, llamada “de Ferrel” presenta mayormente climas templados, mientras que la tercera celda, llamada “Polar” genera climas árticos. Los límites entre las celdas también poseen características particulares que tienen efecto sobre las zonas en las que se encuentren, por ejemplo, la transición entre la celda de Hadley y Ferrel genera los desiertos de Sonora y Chihuahua. Sin embargo, estos limites no son estáticos, ya que a lo largo del año, migran hacia el norte o hacia el sur. En estos límites, se generan unos vientos muy intensos en la atmósfera superior llamados corrientes en chorro o “jet-streams” que pueden alcanzar velocidades superiores a los 400 km/h, mismos que permiten observar las fronteras entre las celdas.
Durante el invierno, en el hemisferio norte la celda polar se intensifica desplazando la celda de Ferrel hacia el sur, llevando masas de aire ártico con ella, sin embargo, no lo hace uniformemente, sino de manera irregular, creando vórtices dinámicos. Estas ondas que se generan en la frontera de las celdas Polar y de Ferrel, en ocasiones se extienden hacia el sur, mientras que, por otro lado, las ondas generadas entre la celda de Hadley y Ferrel se extienden hacia el norte. Si estas dos fronteras con características muy diferentes respecto a la temperatura del aire que transportan colisionan, se dan las condiciones ideales para un ciclón bomba.
El aire cálido que tiende a ir hacia el norte se encuentra con una masa de aire ártico y ésta, como si fuera una cuña, se desliza por debajo, obligando al aire cálido y húmedo a ascender lo cual provoca que se de una súbita baja presión, ocasionando que la masa de aire húmedo y cálido se enfríe, condense y congele, provocando grandes nevadas. Por otra parte, el aire frío continúa descendiendo hacia el ecuador, llevando el ambiente gélido desde las zonas polares hasta el norte de México.
Este tipo de fenómenos atmosféricos no se pueden predecir, sin embargo, el calentamiento global tiene influencia sobre la generación de los ciclones bomba, ya que mientras más caliente sea el planeta, las fronteras son más débiles, y por ende, inestables, por lo que paradójicamente, un planeta más caliente, llevaría a una mayor frecuencia de este tipo de eventos, con sus respectivas consecuencias en diferentes aspectos de la sociedad, como las que pudimos observar en las noticias de días anteriores.
Fuentes:
https://www.lajornadamaya.mx/nacional/208287/ciclon-bomba-en-eu-asi-afecta-el-clima-en-mexico