La palabra Guelaguetza tiene varios significados: algunos refieren que consiste una ofrenda, o bien, ayuda mutua. Desde que el exgobernador Francisco López Cortés, instauró esta celebración en 1932, no ha dejado de tener tintes políticos, aunque tampoco se puede negar la gran difusión que se le hace al maravilloso arte oaxaqueño, representado en sus bailes y trajes regionales.
La Guelaguetza, también llamada fiesta del cerro de El Fortín, está organizada de la siguiente manera: Los dos últimos lunes de julio, se celebra una verbena en la que, las regiones de Oaxaca (antes siete, ahora ocho desde Ulises Ruíz, en 2009), hacen gala de sus danzas y vestimentas locales. Al inicio, se conjuntó con fiestas religiosas, pero, poco a poco se fue alejando de su origen católico, hasta convertirse en una feria laica multicolor. Cada lunes tiene dos representaciones, una por la mañana y otra sesión vespertina.
Para Oaxaca, es un momento muy importante, ya que gran parte de la población vive del turismo. La capital del estado es el primer generador de ingresos en este rubro, seguido de la zona costera de Huatulco y Puerto Escondido. Por esa razón, ante la gran derrama económica que esta gran fiesta representa, muchos sectores quieren verse beneficiados de alguna forma.
La celebración de este año, ha tenido de fondo, la expresa manifestación del gobernador Alejandro Murat, de ser considerado como presidenciable.
Ya en el recinto, el auditorio se vio con filas vacías, cuando en otros años el recinto aparece lleno en su totalidad; cabe destacar, la reventa tuvo precios exorbitantes.
Para saber más sobre el programa de eventos que ofrece La Guelaguetza de este año, que terminará el 1 de agosto, da click aquí
